1. Juego defensivo:
Un jugador avanzado debe saber cuándo jugar a la defensiva, especialmente cuando está claro que otro jugador está cerca de ganar. Esto implica evitar el descarte de fichas que puedan ayudarles a completar su mano.
2. El engaño:
Engañar a los oponentes puede ser una estrategia eficaz. Al descartar una ficha que necesitas o recoger una ficha y descartarla inmediatamente, puedes despistar a otros jugadores con respecto a la composición de tu mano.
3. Memorización:
Recordar qué fichas se han descartado y cuáles todavía están en juego es una herramienta poderosa. Este conocimiento puede informar sus decisiones sobre qué combinaciones aún es posible completar.
4. Dirigirse a manos específicas:
Para los jugadores más avanzados, apuntar a manos con mayor puntuación, a pesar del mayor riesgo, puede ser una estrategia que vale la pena. Esto requiere una comprensión profunda de las reglas de puntuación y un buen ojo para detectar oportunidades.